jueves, 14 de abril de 2016

Un puñado de buenas intensiones


A un año de haber llegado a China y con el sin sabor que produce el saber que este año no hice que la vida de nadie cercano a mí fuera mejor, los últimos días me han llevado a querer entender y comprender por que todas mis "buenas intensiones" regularmente terminan en desilusiones y fríos párrafos que dicen "Espero que te vaya bien, yo hice lo que pude".

Quisiera creer que este es solamente mi problema y que el resto del mundo si lo esta haciendo bien. No porque espere que todos alrededor del planeta estén buscando ayudar a las personas de su entorno, mas bien es un deseo mórbido por encontrar historias y personajes de los cuales pueda aprender el divino y complejo arte de ayudar a las personas que mas queremos.

No se cuantas veces lo han intentado, de hecho no tienen que haberlo intentado para saber que uno de los deseos de todo ser humano en la vida es poder ver a su familia FELIZ. Pero vaya que es un trabajo duro, complejo, espinoso y muy desalentador en muchas ocasiones. Incluso no tenemos que ir a grupos tan complejos, también podemos analizarlo desde el punto de vista de la pareja. Cuantos buenos deseos tenemos cuando se empieza una relación, cuando se sueña con un futuro o se proyectan metas que se desean lograr juntos?

Estoy convencido que todos empezamos con muy buenas ideas, proyecciones, planes, estrategias y "buenas intensiones" para con nuestros grupos sociales. Pero en el camino vamos recibiendo ese feedback, que nos da a entender que no todos están pensando lo mismo. Incluso puede suceder que quieran lo mismo, pero no comparten el camino para llegar a ese objetivo. Y es que al parecer estamos programados para dejar de lado algunos "ideales" pero tarde que temprano terminamos sintiéndonos atacados. Que? Atacados?

Ciertamente si alguna vez trataron de discutir, persuadir o ensenarle a alguien la forma "correcta" de hacer algo, descubrieron esos 5 segundos de mirada endemoniada y caótica que dice "Quien coño de la madre te crees tu?". Peor aun si la persona con la que estas cambiando esquemas es un familiar o tu pareja, porque el tema se lleva a niveles de autoridad, libertad y experiencia. Es aquí donde todos nos sentimos atacados, y me incluyo porque todos lo hemos de haber vivido, a nadie le gusta que le digan que esta equivocado, creo que esto es algo que debemos empezar a eliminar de nuestro sistema de educación, pero es cierto. Ahora bien, la forma en la que reaccionamos después del momento incomodo es lo que nos hace ser individuos, únicos e irrepetibles.

Sin embargo, el porque de este post es un poco mas sencillo que todo este cuento. Y es básicamente mi deseo de contarles que he aprendido, de estar intentando hacer felices a los miembros de mi familia. Porque lo hago? les podría decir que espero que a alguien le sirva en su vida personal para sentir que esto le ha pasado también en su vida o que alguien encuentre util estos párrafos que escribo. Pero la verdad es otra, lo hago como mecanismo de autoconciencia y proceso mental para entender que todos encontramos la felicidad de distintas formas, colores, sabores y en la mayoría de casos en espacios de tiempo totalmente diferentes.

Desde que tengo uso de razón siempre he tenido en mis pensamientos el deseo de hacer feliz a esas personas que se preocupan por mi y dieron toda su juventud para que yo creciera de la mejor forma. Entonces pensaba, les debe gustar viajar, o comer, o comprar cosas, diablos, que les gustara?. Un error que cometí muchas veces fue el de suponer que les gustaría viajar como a mi, o que les gustaría disfrutar de una buena bebida mientras ven el atardecer o que simplemente el poder comprar las cosas que siempre han querido les haría felices.

Para sorpresa mía no era así, lo que me llevo a preguntarles que les gustaba?, HOUSTON!!!, muchos nos pasamos la vida tratando de identificar que nos gusta y al parecer muchas otras personas se olvidan de que les gusta y se dedican a hacer lo que la vida les puso en el camino para sobrevivir. Se olvidan de su felicidad, de sus motivos de vida, del porque están trabajando cada día y el para que desean trabajar. En otras palabras, preguntar tampoco fue la solución.

Ahora bien, esto es lo que he aprendido de mi experiencia tratando de hacer felices a las personas que quiero:
  1. No todos aprecian descubrir nuevas sensaciones y situaciones en la vida, por esto no le dan valor a vivir experiencias nuevas y piensan que es mejor quedarse donde ellos conocen.
  2. Si tienen alguien que vaya con ellos, los lleve, los ayude y los acompañe en cualquier aventura se hace mas fácil recibir un si como respuesta.
  3. No desesperar es la clave, algunas cosas vienen con la edad, los problemas o simplemente llegan porque así debe ser. Intentar y nunca desistir es la única posibilidad.
  4. Todos tenemos diferentes percepciones de felicidad, no imponer actividades, situaciones, métodos o pensamientos es muy importante. Puede ser que eso que tu tanto odias sea el motivo mas grande de felicidad para ellos.
  5. Se feliz, haz lo que te haga feliz, vive contento y con una sonrisa. Me di cuenta que el motivo mas grande de felicidad de cualquier miembro de la familia es ver a sus familiares felices.

Hace ya un año que estoy en China, viviendo aventuras que jamas se cruzaron por mi mente y por ello doy gracias. Sin embargo la mayor felicidad que puedo sentir en la vida es ver a mis familiares contentos, sonriendo y disfrutando de sus vidas. Este año no ayude a nadie a mejorar su vida, pero creo que aprendi e intente todo para hacer felices a las personas que quiero. No dejare de seguir intentándolo y a la fecha estoy muy tranquilo de saber que todo lo he que he realizado en mis años de vida les produce sonrisas. 


Por si algún día leen esto, ustedes son mi felicidad! 

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